Juan Carlos Aguilar, conocido como «El chacal», fue condenado a prisión perpetua por el homicidio de su hijastra, María Milagros Vázquez. El hombre abusó de su hijastra durante 14 años, período en el cual la dejó embarazada en dos ocasiones, y finalmente la asesinó en julio de 2024.
El juicio abreviado se llevó a cabo en la Cámara de Sentencia en lo Penal de la provincia. Aguilar fue imputado por homicidio doblemente calificado por mediar violencia de género y por femicidio, en concurso real. La abogada de la querella, Marcela González, destacó la rapidez del proceso judicial, que concluyó en cinco meses desde el crimen hasta la sentencia.
El 13 de julio de 2024, Aguilar llevó a Vázquez al monte bajo el pretexto de cortar pasto. Horas después, regresó solo y confesó a una de sus hijastras: «Me mandé una macana con la María». Tras la denuncia de la madre de la víctima, la policía inició una búsqueda que culminó con la detención de Aguilar, quien intentaba suicidarse. Posteriormente, indicó el lugar donde se hallaba el cuerpo de Vázquez.
Este caso pone de manifiesto la gravedad de la violencia de género y la necesidad de abordar con urgencia la protección de las víctimas en situaciones de abuso intrafamiliar. La condena de Aguilar representa un paso hacia la justicia, pero también resalta la importancia de prevenir y detectar tempranamente estos casos para evitar tragedias similares.

“Él pidió perdón, pero desde la querella y en representación de la familia Vázquez no le creemos ni una palabra”, expresó la abogada en diálogo con TN. Es que la víctima vivió una relación marcada por la violencia naturalizada y un calvario que duró más de una década.
“La defensa argumentó y dio a entender que es inconstitucional la prisión perpetua. Ellos seguramente después buscarán la manera de una acción morigeradora, que no se da en este contexto por tratarse de un femicidio”, agregó.
Para González, “todas las pruebas que se han recolectado junto al Ministerio Público Fiscal con la Dra. Jorgelina Sobh, de la sexta circunscripción de recreo, se hicieron de una manera impecable, ya que se cerró la investigación en un tiempo récord de 5 meses”.
“Quedó expuesto en este juicio abreviado lo que venía padeciendo Milagro Vázquez, la violencia que venía sufriendo a lo largo de los años y que cuando ella dijo ‘basta’, él decidió matarla”, cerró.

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