Un ciudadano boliviano, identificado post mortem como Javier Herrera Pérez, falleció en el Hospital San Bernardo de Salta tras ser diagnosticado con cáncer de páncreas. La identidad que utilizó para ingresar al hospital pertenecía a un miembro de la comunidad Wichí de Santa Victoria Este. Herrera Pérez, oriundo de Tarija, Bolivia, presentó un DNI «prestado» para recibir atención médica.
El paciente fue ingresado a principios de agosto en estado crítico, acompañado por una mujer que afirmaba ser su pareja. Tras su fallecimiento el 13 de agosto, se notificó a la comunidad indígena sobre el deceso, lo que generó confusión al constatar que el verdadero titular del DNI seguía con vida.
Confrontada con la situación, la mujer confesó que Herrera Pérez era indocumentado y que habían utilizado un DNI prestado por un conocido para acceder a servicios médicos. El caso fue judicializado, impidiendo que la mujer retirara el cuerpo del hospital. Posteriormente, abandonó el albergue donde se hospedaba y cortó todo contacto.
Las autoridades sospechan que la intención detrás del uso del DNI prestado fue obtener atención médica gratuita. Este incidente ocurre en un contexto donde se implementó en Salta el cobro de servicios a ciudadanos extranjeros. El cuerpo de Javier Herrera Pérez aún permanece en la morgue del hospital.
La insólita situación puso en alerta a todas las autoridades, ya que deberán endurecer los controles en los hospitales para evitar nuevamente estas situaciones. Además, se abrió otra investigación, ¿el DNI fue prestado o alquilado?