A días de las festividades centrales y la gran Procesión del Milagro, cientos de peregrinos ya cumplieron un año más con sus promesas y llegaron a la Catedral al encuentro con las Sagradas Imágenes del Señor y la Virgen del Milagro.
Hoy, cerca de las 10:30 de la mañana, llegaron 450 peregrinos de Molinos a pie. El numeroso grupo salió el sábado 7 de septiembre a las 20:30 de la noche. y recorrieron más de 170 kilómetros en cinco días.
Macario Chocobar fue uno de los cientos molineños que peregrinaron y contó que es el quinto año que lo realiza. «Fue muy cansador, estos últimos tres días hubo mucho sol pero lo importante es que llegamos», expresó.
El peregrino aseguró que este año se sumaron más jóvenes al grupo. «Hacemos ese trabajo de invitar a nuestros amigos y a la gente de Molinos y por suerte reciben bien la invitación y muchos se sumaron». Macario contó las impresiones que tuvieron los nuevos peregrinos: «se quedaron sin palabras cuando llegaron, todos emocionados y con una sensación que les quedó en el corazón». Como cada año, Macario pidió por la salud de toda su familia y la de todos los salteños.
Matias, un bici peregrino de Seclantás, llegó esta mañana cerca del mediodía junto a un grupo de amigos, quienes lo impulsaron a peregrinar por primera vez en bicicleta. «Salimos ayer a las cuatro de la madrugada, retomamos camino esta mañana y por suerte llegamos todos bien». Matías contó que peregrinó durante tres años a pie y que para este Milagro se compró una bicicleta y emprendió camino.
«Es inexplicable lo que se siente llegar, te da una energía especial, salís renovado y se te va el peso que traías cargado», expresó. Este año, Matias agradece por al Señor del Milagro por haberse recibido de profesor de Educación Primaria y pide porque se cumplan todos sus proyectos personales.
Karina peregrinó por primera vez en bicicleta desde Coronel Moldes y compartió su experiencia. «Vinimos junto a un grupo de amigos bikers, con los que siempre salimos a andar en bici y nos propusimos venir a la Catedral», contó.
«Vine por fe, vengo a pedirle a los Santos Patronos por la salud, el trabajo, que haya mas unión en la comunidad, y pido por los abuelos y los niños».
Cristian es un joven capitalino que junto a su familia salió desde Coronel Moldes a las seis de la mañana para vivir la experiencia de peregrinar por primera vez. «Gracias a Dios llegamos y fue una experiencia muy linda». El joven contó que fue su hijo Enrique quien lo impulsó a llevar a cabo esta muestra de fe y sacrificio. «Vinimos por él, porque tiene convulsiones y pedimos para que su salud se mejore».
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