Un golpe certero al narcotráfico internacional se asestó en las últimas horas en Paraguay, con la incautación de más de 4 toneladas de cocaína, la mayor cantidad jamás decomisada en este país. La droga, ocultada ingeniosamente en bolsas de azúcar, pretendía burlar los controles y cruzar el océano Atlántico con destino al puerto belga de Amberes, uno de los principales puntos de entrada de cocaína a Europa.
Un operativo meticuloso
El hallazgo se produjo en el puerto privado de Caacupemí, ubicado cerca de Asunción, durante el desarrollo de la Operación Dulzura. Un trabajo de inteligencia de varias semanas, permitió a las autoridades paraguayas detectar la irregularidad en un cargamento de azúcar que consistía en 78.000 bolsas.
Al revisar minuciosamente la carga, se descubrió que las bolsas de azúcar contenían en su interior paquetes de cocaína de 20 kilos cada uno, un método de camuflaje poco usual que dificultó la identificación mediante escáneres.
Un nuevo modus operandi
Este ingenioso método de esconder cocaína en productos alimenticios no es nuevo, pero sí llama la atención por su sofisticación. Las autoridades paraguayas advierten que este tipo de estrategias podría ser utilizado con mayor frecuencia por los narcos para burlar los controles y desviar la atención de las fuerzas de seguridad.
Paraguay: un eslabón clave en la ruta de la cocaína
En los últimos años, Paraguay se ha convertido en un importante eslabón en la ruta de la cocaína que se produce en Bolivia, Perú y Colombia y que tiene como destino final Europa y Asia. La Hidrovía Paraná-Paraguay, una extensa red fluvial que atraviesa varios países sudamericanos, se ha convertido en una vía crucial para el tráfico de esta droga.
La incautación de este cargamento récord de cocaína representa un duro golpe para las organizaciones criminales dedicadas al narcotráfico. Se estima que el valor de la droga supera los 200 millones de dólares.
Las autoridades paraguayas han iniciado una investigación para desmantelar la red criminal detrás de este millonario contrabando e identificar a los responsables. Este caso pone de manifiesto la necesidad de una mayor cooperación internacional para combatir el narcotráfico, un flagelo que afecta a todos los continentes.
La sombra del narcotráfico en el Cono Sur
La figura de Sebastián Marset, conocido como «el narco de las mil caras», se vuelve a perfilar en este caso. Este prófugo, buscado por la justicia de varios países, es señalado como uno de los principales actores del narcotráfico en el Cono Sur.
Sebastián Marset, conocido como ‘el narco de las mil caras’.
Su fuga de Bolivia en 2023, con la ayuda de un grupo paramilitar y tomando un rehén, y las versiones que lo ubican en Dubai, donde se gestó el escándalo con el gobierno uruguayo por haberle otorgado un pasaporte oficial, encienden las alarmas sobre la infiltración del narcotráfico en las estructuras de poder.-ciudadano.News-
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