La Municipalidad de la ciudad de Salta tomó medidas enérgicas luego de un violento enfrentamiento entre fruteros en la calle Ituzaingó, donde algunos comerciantes fueron sorprendidos portando machetes, cuchillos y otros objetos punzantes. Tras el incidente, se decomisó la mercadería de los involucrados y se retiraron los carros ubicados en una de las arterias más importantes de la capital, recordando la prohibición de la venta ambulante en esa zona.
En una entrevista con Somos la Mañana, el Secretario de Espacios Públicos, Esteban Carral Cook, detalló las acciones que se están tomando y explicó que a principios de año se realizó un relevamiento entre los trabajadores ambulantes. Durante este proceso, se descubrió que una persona poseía hasta cuatro carros fruteros, ocupando espacio en la vía pública, con algunos de ellos operando desde hace más de 20 años.
Carral Cook subrayó la disposición del municipio para abrir un diálogo con los trabajadores y así regularizar su situación y reubicarlos en lugares que no afecten la fluidez del tránsito en la ciudad. «Hace una semana, en calle Ituzaingó, dos vendedores se enfrentaron con machetes en la vía pública. La policía, en conjunto con la Secretaría de Espacios Públicos, intervino para prevenir mayores conflictos. A pesar de que el incidente dejó varios detenidos y una persona hospitalizada, al día siguiente los carros estaban en el mismo lugar», relató el funcionario.
Durante tres días, el municipio trabajó en el decomiso de la mercadería y el desmantelamiento de los puestos, encontrando armas punzantes en uno de los carros. «Queremos entablar un diálogo con los trabajadores para regularizar la situación de los carros. Al inicio del relevamiento, había 18 carros, y ahora son 25. No se trata de más familias, sino de personas que manejan varios carros», concluyó Carral Cook, enfatizando la necesidad de liberar las calles para mejorar la circulación vehicular en la ciudad.